La separación de los pichones de canarios es un proceso crucial en la cría y desarrollo de estos pequeños pájaros.
Durante las primeras semanas de vida, los pichones dependen completamente de sus padres para alimentarse y aprender los comportamientos básicos. Sin embargo, llega un momento en que deben ser apartados de sus progenitores para fomentar su independencia y permitir que los adultos continúen con el ciclo reproductivo. En este artículo, exploraremos los pasos y cuidados necesarios para llevar a cabo la separación de manera efectiva, asegurando la salud y bienestar tanto de los pichones como de sus padres.
Cuando los pichones de canario alcanzan alrededor de los 20 días de vida, comienzan a explorar su entorno y suelen abandonar el nido. Aunque se mantienen bajo el cuidado y la alimentación del padre, la madre empieza a prepararse para la siguiente etapa reproductiva, construyendo un nuevo nido para la siguiente puesta.
En las jaulas de cría actuales, diseñadas especialmente para la cría de canarios, existen compartimentos separados por una rejilla. Esta disposición permite que los pichones sigan recibiendo alimento del padre sin riesgo de que la madre, que ya se encuentra lista para otra puesta (nidificar nuevamente), y les arranque las plumas.
Aproximadamente a los 25 días de vida, los pichones comienzan a picotear por sí mismos pasta de cría y semillas germinadas. Una vez alcanzan el mes de edad, ya están preparados para ser trasladados al jaulón de vuelo o recría, donde disponen de más espacio para ejercitarse y desarrollar sus habilidades.
Durante los primeros días de separación, es crucial que el criador supervise atentamente a los jóvenes canarios para asegurarse de que se alimenten correctamente por su cuenta. En esta etapa, es recomendable introducir gradualmente verduras frescas en su dieta, que posteriormente serán sustituidas por manzana, facilitando una transición suave hacia una alimentación más variada.
Quince días después de la separación de los padres, los jóvenes canarios deberían ya estar consumiendo semillas de forma independiente. En este periodo, los machos comenzarán a emitir sus primeros trinos, mostrando las primeras señales de su canto característico.
Consejos para un buen manejo durante la separación:
- Supervisión constante: En los primeros días, es importante vigilar que los pichones comen por sí solos y muestran interés por la comida sólida.
- Transición alimenticia: Introduce verduras frescas y luego manzana para fomentar una dieta variada y nutritiva, esencial para su desarrollo.
- Espacio adecuado: Asegúrate de que el jaulón de vuelo o recría sea lo suficientemente amplio para que los jóvenes canarios puedan moverse libremente y desarrollar su musculatura.
- Observación del canto: Presta atención a los primeros intentos de canto de los machos, lo que indicará un buen desarrollo.